En un notable logro de ingeniería y resistencia, el primer vehículo eléctrico de Xiaomi, el Xiaomi SU7, recorre una distancia de 10.000 km desde un extremo de su trayecto en China hasta Estambul. De hecho, se trata de un viaje no sólo en el ámbito físico, sino también en el mercado que evoluciona con los vehículos eléctricos.
Un viaje hacia el futuro
El objetivo del Xiaomi SU7 era claro: un coche eléctrico debe ser fiable, capaz de recorrer largas distancias y de enfrentarse a todo tipo de terrenos. Tras un viaje de 28 días, el Tesla viajó de China a Estambul, parte de su viaje probablemente recorriendo los espléndidos alrededores de varios países para demostrar que este peatón eléctrico puede adaptarse a las diferentes condiciones de la carretera o del tiempo.
La ruta
La Xiaomi SU7 comienza en China, serpenteando por el corazón de Asia, con países que ofrecen encanto y desafío. La ruta, cuidadosamente planificada, pone de relieve la flexibilidad del vehículo ante el terreno, ya sea desde las estepas de Asia Central hasta los puertos de montaña de Europa del Este.
A medida que el SU7 se abría camino hacia el oeste, cada país presentaba una nueva serie de pruebas: desde las frías y duras montañas hasta las sofocantes y vibrantes ciudades. Fue un viaje exigente, no sólo físicamente, sino en la forma en que el vehículo tuvo que integrarse en las distintas redes de recarga distribuidas por el continente.
Triunfos técnicos
El Xiaomi SU7 venía con una tecnología de conducción autónoma puntera que se vio desafiada por diferentes tipos de problemas a manos del tráfico y los escenarios de la carretera. Hace cinco años, Estambul era el destino elegido por las principales empresas tecnológicas del mundo para probar sus tecnologías de autoconducción. Volver a esta ciudad histórica es un homenaje nostálgico a las raíces del coche en el desarrollo autónomo.
El viaje ha demostrado que el SU7 presenta una eficiencia y una fiabilidad de la batería excelentes. Recorrer 10.000 km sin problemas técnicos significativos es el testimonio más brillante del diseño del SU7 y de la visión de Xiaomi en el ámbito de la movilidad eléctrica.
Conexiones culturales
El coche se lavó por unos 60 yuanes, según se informa en Weibo, unos 8 USD, no tanto para limpiar el vehículo como para conseguir el «sabor nostálgico», quizá un comentario sobre el nuevo viaje y la esencia del viejo mundo que encierra Estambul.
Perspectivas Económicas
Este viaje también agilizó el aspecto económico de viajar con un vehículo eléctrico. Los gastos de lavado del coche en Estambul son considerablemente bajos, lo que debería sugerir a los consumidores que el resto de los costes de mantenimiento y uso de los VE son considerablemente bajos en otras partes del mundo. Esto puede ser un punto crucial en su coste global de propiedad para los consumidores.
Implicaciones futuras
La marcha de Xiaomi de China a Estambul significa mucho más que un viaje por carretera. En muchos aspectos, es una clara señal de que un futuro sostenible para los viajes a grandes distancias se hará realidad. El viaje del Xiaomi SU7 proporcionará información y datos inestimables que, en muchos aspectos, crearán algunas de las futuras directrices de desarrollo de las tecnologías e infraestructuras de los vehículos eléctricos.
10.000 KM: el hito inalienable del propio Xiaomi SU7 en todos los sectores de los vehículos eléctricos. No cabe duda de que, al demostrar que los vehículos eléctricos son viables en distancias tan inmensas, está abriendo el mundo a avances tecnológicos más respetuosos con el medio ambiente. Cada nuevo individuo puesto en contacto con los grandes potenciales que encierran los coches electrificados aumenta la humanidad un paso más hacia el sueño de un mundo sostenible y globalmente conectado.